El título de la película es profundo y surge a partir de uno de mis poemas favoritos, escrito por Alexander Pope.
"Felices son aquellos que viven sin culpa! Ellos se olvidan del mundo y son olvidados por éste. El eterno resplandor de una mente sin recuerdos que sólo acepta sus oraciones y rechaza sus deseos”
Alexander Pope (1688-1744)
Eterno resplandor de una mente sin recuerdos reúne un conjunto de personajes muy peculiares, lo que le aporta interés a la trama. En mi opinión la película te engancha desde el principio, el surrealismo utilizado estuvo genial, transmite muchos sentimientos, sí no la han visto los invito a que se tomen el tiempo de verla, en realidad vale la pena.
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